La delegada del Gobierno andaluz, Patricia Navarro, ha querido dejar claro este jueves que la Junta de Andalucía “va a dar la batalla para pedir que el agua necesaria llegue a la comarca de Antequera”, insistiendo al Gobierno central que autorice el trasvase de agua desde el embalse de Iznájar (Córdoba).
Desde la Administración andaluza se asegura que ya se han consignado una partida de 50 millones de euros y por ello ahora reclaman el compromiso firme del Ejecutivo de la Nación para abordarlo, ya que debe aprobarse en Consejo de Ministros. “Es la primera vez que la Junta asume claramente esta inversión, con la que se resolvería el problema de abastecimiento de agua de la comarca norte de Málaga, una vez que el Gobierno autorice la transferencia de 4,89 hm3 desde el embalse de Iznájar”, ha indicado la delegada.
Navarro ha remarcado que “se trata de un trasvase fundamental, que hemos pedido por activa y por pasiva, y que hemos tenido claro que decía hacerse desde el primer momento, pero aquellos que antes lo demandaban ahora lo quieren hacer desaparecer de la agenda política”.
Cambio de tornas
Con ello, la delegada ha hecho alusión a responsables del PSOE que durante la etapa del PP al frente del Gobierno central reclamaron el proyecto en más de una ocasión. Lo hicieron desde ayuntamientos afectados, como los de Humilladero, Fuente de Piedra o Villanueva del Rosario; en la Diputación de Málaga; en el Parlamento de Andalucía y desde el Congreso de los Diputados.
En aquella época, el delegado el Gobierno central en Andalucía, Antonio Sanz, aseguró tras una reunión con responsables municipales de la comarca en el Ayuntamiento de Antequera que “ya ha sentado las bases” para posibilitar el trasvase de agua desde el embalse de Inzájar. Incluso en aquel encuentro de septiembre de 2016 dijo que se había iniciado los trámites “para la elaboración del correspondiente estudio de viabilidad técnica, económica, medioambiental y social”. Eso sí, desde la Administración central, gobernada por el PP, también se pedía a la Junta, gobernada por el PSOE, que se fueran haciendo las obras de abastecimiento y canalización a fin de que una vez se apruebe en Consejo de Ministros el trasvase. Aquellas actuaciones, nunca se comenzaron.
Sanz explicó a los asistentes que la Confederación Hidrográfica del Guadalquivir ya había modificado el Plan Hidrológico del Guadalquivir, a fin de poder completar dichas necesidades de agua. Y también instó a la Junta a “no eludir la responsabilidad que le confieren sus competencias”, pidiendo que las obras sean declaradas de interés general para que las financie el Estado. Responsables del Ejecutivo andaluz lo pidieron. Lo hizo igualmente el diputado nacional del PSOE Miguel Ángel Heredia, a través de una iniciativa. Incluso el congresista también llegó a preguntar directamente al Gobierno por este asunto. La respuesta: que el vigente Plan Hidrológico de la Demarcación Hidrográfica de las Cuencas Mediterráneas Andaluzas, que redactó en su día la Junta «no incorpora la necesidad, ni en la situación actual ni en el horizonte 2021, de transferir un volumen concreto de recursos, para garantizar el uso abastecimiento de los municipios de Antequera, Archidona, Campillos, Mollina, Villanueva del Trabuco, Villanueva del Rosario, Humilladero y Fuente de Piedra”.