“El Gobierno clava una nueva puñalada al sector agrario con la subida de un 8%” en el Salario Mínimo Interprofesional (SMI). Así de contudentes se muestran en Asaja Málaga tras la medida anunuciada esta semana en el Senado por parte del presidente Pedro Sánchez.
Este aumento, que supone pasar de los 1.000 euros al mes, con 14 pagas, a los 1.080 euros está por encima de la subida generalizada de los precios el pasado años ya, que el dato de la inflación se situó en el 5,7%. Y para esta organización supone “un nuevo varapalo para el sector”, ya que entienden que el incremento de costes salariales y laborales -que, además, lleva aparejada una subida en las bases de cotización de la Seguridad Social-, ponen “en una situación crítica” a los empresarios
agrícolas, que ven cómo tienen que asumir unos 1.547 euros más por trabajador.
Unos 27.000 trabajadores agrarios hay en toda la provincia. Desde Asaja Málaga aseguran que son muy necesarios en todas las labores, pero principalmente en las tareas de recolección, “que en muchos casos y hasta ahora se realizan mayoritariamente con mano de obra temporal contratada”. A eso se añade que en el sector agrario no existe contrato parcial por horas, con lo que muchas labores que se realizan a media jornada se tienen que cotizar por la jornada completa, lo que implica más coste laboral. “Ante esta situación son muchos los agricultores que se plantean cambiar de cultivos por otros más mecanizables reduciendo así su carga laboral, lo que afectará al empleo”, explican desde la entidad.
Además, desde la organización agraria advierten que la subida también va a tener repercusión negativa en los convenios colectivos del campo que se están negociando, “porque deja a la patronal sin nada que ofrecer a los trabajadores”. “Se ha roto totalmente la diferencia entre los jornales con menos cualificación con los que requieren una mayor formación y responsabilidad, por lo que se desincentiva totalmente el adquirir esta cualificación tan necesaria en el sector agrario”, apuntan.
Desde 2017, año en el que el SMI estaba en 707,70 euros, ha habido una subida del 52,60%,“aumentos que no se han compensado con deducciones o bonificaciones sociales que alivien al sector”, como piden desde Asaja. Y a ello suman el incremento de los costes de producción, las consecuencias de la guerra de Ucrania o la sequía.
“Esta subida es la guinda que le faltaba al sector para condenarlo al abandono por parte de los empresarios, y por consiguiente, a la ruina más absoluta”, lamentan desde Asaja Málaga, que pide al que “no a cebarse con el sector empresarial agrario”.
