La Plataforma del Tren Rural de Andalucía (PTRA) ha criticado este miércoles el “tocomocho” ferroviario que las administraciones consideran han generado en la comarca y la “discriminación” que sufre al respecto. Y es que, por un lado, después de más de 16 millones de euros de inversión en los últimos años aún no se ha puesto en marcha la Estación Antequera Alta Velocidad, cuya inauguración se ha retrasado en más de una ocasión. “Primero, no se sabe cuando va a abrir. Y segundo, y lo peor de todo, es que pese a que vaya a abrir, no sabemos qué trenes va a albergar y que servicios ferroviarios se va a dar”, ha lamentado el secretario de Acción Sindical de CGT Málaga, Miguel Montenegro.
Por otra, no comprenden cómo, mientras que el Gobierno anuncia medidas como el mantenimiento de la gratuidad de los trenes de cercanía, este modelo sigue sin llegar a la comarca, a pesar de la solicitud que llevan haciendo desde hace años para que se prolongue la línea C-2 que llega hasta el municipio de Álora. De hecho, desde esta plataforma van más a allá y consideran que Bobadilla Estación debería ser un punto de enlace de dicho servicios de cercanías con los trenes que llegan hasta Ronda, a través de un intercambiador. “No es normal que, en pleno siglo XXI, habiendo infraestructuras ferroviarias en buen uso estén infrautilizadas y no de servicio a pueblos y ciudades medias de esta zona geográfica”, ha incidido Montenegro.
Además, a ello hay que sumar que desde hace más siete años no para ningún tren en el casco urbano de Antequera, tras las obras y la puesta en marcha de la línea de alta velocidad entre la localidad y Granada.
“No somos inocentes. Queremos el mismo trato. Las infraestructuras ferroviarias están para usarlas. Se han hecho con dinero público, con nuestro impuestos”, ha subrayado Montenegro, acompañado de varios miembros de la plataforma, entre ellos vecinos de Bobadilla Estación.
La presidenta de la asociación vecinal de esta entidad local autónoma del municipio de Antequera, Carmen Berrocal, ha dejado claro que la comarca necesita no sólo servicios de alta velocidad o de largo recorrido, sino también de media distancia y cercanía para que “donde haya una estación, que paren los trenes”, como también vienen reclamando para otros municipios como Fuente de Piedra.