Vecinos de la entidad local autónoma (ELA) de Bobadilla Estación se han concentrado este martes en una oficina de Unicaja Banco de la calle Infante don Fernando de Antequera para protestar por el cierre de las instalaciones que esta entidad bancaria tenía abierta en la localidad hasta la pasada semana.
“No a la eliminación de servicios esenciales en los pueblos. Por un medio rural vivo y habitable. Unicaja Banco maltrata a los pueblos de Málaga y a sus vecinos”, rezaba la pancarta que han portado estos residentes de la ELA, que han querido mostrar así su malestar sobre una medida que se ha llevado a cabo en otra decena de oficinas de la comarca de Antequera y la Serranía de Ronda, como ha sido el caso de Villanueva del Tapia.
Representantes de CGT Andalucía han acompañado a la Asociación de Vecinos de Bobadilla Estación y a otros vecinos de la provincia afectados en esta acción de protesta, en la que han lamentado “la situación de abandono” del mundo rural por medidas como estas. “Día a día, se les niega el acceso a un transporte público digno, a servicios públicos suficientes, y por si con eso no fuese bastante, a los servicios bancarios necesarios para su subsistencia”, señalan desde el sindicato.
Precisamente a esta oficina de Unicaja en la calle Infante don Fernando, cerca de la plaza de San Sebastián, es donde se han traspasado los usuarios de la entidad bancaria que hacían sus gestiones en la instalación de Bobadilla Estación. Como recuerdan desde el CGT, a muchos vecinos le es complicado desplazarse, “y otros tantos casos es imposible realizarlo, lo que supone claramente negar el acceso a su dînero de miles de usuarios.”.
“No nos pueden dejar sin servicios básicos y a la vez tener beneficios millonarios”, ha comentado, el coordinador del Medio Rural de CGT Andalucía, Alejandro Serrato, que aboga como pide el sindicato por la creación de una banca pública y que se intervengan oficinas para mantener el servicio en pequeños municipios donde está desapareciendo.