Son varias las empresas que se dedican a la fabricación del mollete de Antequera, tanto en la localidad como en pedanías e incluso en municipios de la comarca. Sin embargo, la Indicación Geográfica Protegida (IGP) en la que se está trabajado sólo está siendo promovida por dos compañías, a través de la Asociación Pro-Mollete de Antequera: Horno El Antequerano y Mollete San Roque.
Otros fabricantes de este pan tan típico de la localidad se sienten excluidos de no participar en esta iniciativa y han presentado una consulta ante la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia porque consideran que la iniciativa no aglutina a la mayoría del sector.
Este grupo formado por una decena de empresa, que aseguran suman el 85% de la producción y en las que trabajan unas 80 personas, consideran que se está vulnerando la normativa de la libre competencia al impedir a otros productores elaborar molletes y “sigan haciéndolo en igualdad de posibilidades y según méritos, condiciones justas, equitativas y en idénticas condiciones a los que no estén dentro de la zona geográfica”. Además, temen que si se obtiene la IGP y asociación pasa a convertirse en consejo regulador se llegue se impida poder acceder a un determinado sector del mercado al resto de fabricantes, “haciendo peligrar los citados puestos de trabajo”.
La IGP Mollete de Antequera que se está promocionando no sólo cuenta con el respaldo del Ayuntamiento. También de de la Diputación, a través del sello de productos agroalimentarios Sabor a Málaga, y de la Junta de Andalucía y del Gobierno central, que ya en su día elevó su dictamen a la Comisión Europea, para que dé su visto bueno.
Es por ello que la queja también ha sido trasladada al organismo provincial y a eurodiputados de varios partidos, a los que piden piden el veto a la aprobación europea. A su juicio, la Comisión Europea que debe vigilar e investigar las prácticas y ayudas estatales anticompetitivas a fin de garantizar condiciones de competencia equitativas para las empresas de la UE y asegurar una oferta amplia y precios justos para los consumidores.
Padepan es una de las empresas que está protestando por esta situación. No se explican que la producción de la IGP se circunscriba a fabricantes de Antequera y Fuente de Piedra, si el objetivo era defender el origen histórico de este pan antequerano, y sin embargo después sólo se extienda a otro municipio más de la comarca. En su caso, están ubicados en Mollina, pero la compañía tiene una antigüedad mayor que la fábrica de Fuente de Piedra.
Como recuerdan desde Padepan, el origen del impulso de una IGP Mollete de Antequera surgió de la inquietud de todos los productores de la comarca, que fueron convocados inicialmente a una reunión en 2004 auspiciada por el Ayuntamiento de Antequera. Posteriormente se creó una asociación para la promoción, pero ya no se contó con buena parte de aquellos productores, que incluso intentaron adherirse al colectivo, hasta el punto de realizar consultas jurídicas y pidiendo intermediación del Consistorio.
