La Diputación Provincial ha concluido la redacción del proyecto para restituir el tráfico en la carretera MA-6404, que une los municipios de Campillos y de Teba, vía que permanece cortada desde octubre de 2018 tras la lluvias torrenciales que asolaron la zona del Guadalteba. Asimismo, para las actuaciones con las que dar mayor seguridad vial a la carretera MA-4400, de acceso a Bobastro, en el término municipal de Ardales. Para ambos proyectos se invertirá más de 2,4 millones, financiados en un 50% con fondos del Estado.
En las primeras actuaciones se invertirán algo más de 1,6 millones de euros para unos trabajos con lo que reconstruir la calzada, destrozada por los desbordamientos de torrentes en la zona provocados por las fuertes precipitaciones que dejó la DANA (depresión aislada de niveles altos) de aquellos días. En concreto, el trazado quedó completamente cortado en el punto kilométrico 5+300 a su paso por el arroyo del Chumbo.
Las obras tienen un plazo de ejecución de un año y contemplan la construcción de un puente para salvar el cauce del arroyo, que tendrá carriles de 3,75 metros, con arcenes de medio metro y pretiles de protección y con tres vanos de 30 metros cada uno, que permitirán evacuar las aguas en caso de lluvias fuertes. Igualmente se ha previsto la reposición de cunetas de hormigón, drenaje transversal mediante tubos de hormigón, de la señalización horizontal y vertical y del camino existente para dar acceso a las fincas colindantes, según ha informado la Diputación este domingo.
En esta misma vía entre Teba y Campillos, se procederá a la reposición con hormigón de un tramo de cuneta dañada en torno al punto kilométrico 4 y a un revestimiento de escollera de protección de taludes de un metro de espesor y un metro y medio de altura total en torno al punto kilométrico 8.

Acceso a Bobastro
Por otra lado, se invertirán 800.000 euros en la construcción de un nuevo puente de acceso a Bobastro sobre el arroyo del Granado. El temporal obligó a cortar la vía, impidiendo el acceso a la ruinas del conjunto arqueológico de la zona –hito incluido en el proyecto de candidatura del Caminito del Rey a Patrimonio Mundial de la Unesco– y también al embalse superior del complejo hidroeléctrico del Tajo de la Encantada y a las viviendas existentes a lo largo de la carretera.
En su momento, la Diputación realizó entonces unas obras de emergencia modificando el trazado de la carretera con un badén. Sin embargo, dicha estructura se planteó como una una solución provisional y ahora ha redactado un proyecto que restituirá el trazado original de la carretera. El nuevo puente contará con una calzada de dos carriles de 3 metros cada uno, medio metro de arcén y aceras en ambos márgenes de 2 metros cada una, con anchura total de 11 metros.