Desde este lunes, el tramo de la calle Chimeneas de Antequera que conecta las calles Lucena y Herrezuelos es una vía peatonal sin acceso al tráfico rodado. La medida se aplica tras la reciente renovación integral que se ha llevado a cabo.
Para impedir el paso de los vehículos, el Ayuntamiento ha colocado un macetero, que también sirve de adorno de esta vía del Centro Comercial Abierto. De esta manera, los vehículos que han entrado en la calle Herrezuelos y que quieran dirigirse hacia la calle Lucena deberán obligatoriamente que hacer el giro en la calle Mancilla -actualmente también en obras-, “que es más lógico y el giro es más adecuado”, como ha apuntado hoy el alcalde Manolo Barón, durante una visita a la vía.
Desde los años 70 no se había actuado en esta calle, ahora peatonal, lo que para el Ayuntamiento de Antequera es una muestra de la apuesta “sin precedente” para favorece el tránsito peatonal y fomentar el comercio local. “Sumamos más metros a la peatonalización de Antequera allí donde se puede favorecer”, ha subrayado el concejal de Obras, José Ramón Carmona, en la visita a esta vía en la que también ha presente la concejala delegada de Urbanismo, Teresa Molina.
Unos 75.000 euros se han invertido en la renovación de la calle Chimeneas, donde además de la remodelar el piso, haciendo una única plataforma, también se han sustituido todas las canalizaciones y saneamientos de la calle. Esta actuación está enmarcada en el Programa del Fomento del Empleo Agrario (PFEA) y las obras han trabajado hasta 15 personas, entre peones y oficiales.
