El pasado 27 de diciembre el Grupo Idec recepcionaba las obras de la primera fase de urbanización del Puerto Seco de Antequera. Y ya están manos a la obra con la comercialización de esta gran área logística en el corazón de Andalucía con el proyecto Dry Logistic 40: una plataforma de 42.000 metros cuadrados. “Es una de las muchas de las que vamos a comercializar”, asegura la delegada del Grupo Idec en España, Maite Palomino.
Comenzada ya la comercialización del Puerto Seco de Antequera, ¿cómo se está dando a conocer?
A través de folletos, de vídeos, de las redes sociales, de salones inmobiliarios, salones logísticos… Somos una multinacional y todas nuestras comunicaciones las hacemos en inglés, en francés, en castellano y, a veces también, en chino. Y ahora donde estamos trabajando más es en Vietnam. La comunicación la llevamos al nivel máximo posible. El Puerto Seco no es un proyecto de Andalucía o del sur de España, es un proyecto internacional.
Finalizada ya la obra de urbanización de la primera fase, ¿cuándo se podrían ver las primeras naves en funcionamiento?
Depende de los clientes, pero diría que para 2025 ya deberíamos estar, si no con naves en funcionamiento, si a punto de comenzar.
¿La primera nave anunciada estaría en esa fecha?
Sí, perfectamente.
¿Se ha planificado como una especie de ‘nave piloto’ o la construcción es a demanda?
Hacemos llave en mano. Hacemos a cada uno la nave que necesita. Esta nave es porque si alguien necesita una nave con urgencia, pues ahí está.
Hoy en día en toda Andalucía, y diría que en España, es difícil encontrar un terreno urbanizado con posibilidades de hacer naves XXL, como las llamamos nosotros, como las que habrá en el Puerto Seco. Y concretamente en Málaga, que hay un problema de terreno.
Las empresas empiezan a ver que Antequera es un nudo de comuncaciones y es un lugar estratégico para desarrollarse, sobre todo por la conexión estratégica que tiene con el Puerto de Algeciras. Por lo tanto, si alguien quiere la nave aquí hay esa posibilidad.
Incluso si quisieran una nave de 100.000 metros la tendrían, porque Idec tiene 550 trabajadores, la mayoría ingenieros y arquitectos, gente muy especializada, y trabajamos con ingenierías locales, y esto permitiría hacer una nave rápidamente.
Debido a la falta de oferta, ¿esa posibilidad de contar con esas meganaves es el gran atractivo del Puerto Seco de Antequera?
Ese es uno de los puntos. La primera vez que vi el proyecto del Puerto Seco pensé que era un parque logístico e industrial de manual. Lo tiene todo. Entre las principales ventajas es el hacer grande naves, pero sobre todo la comunicación.
Cuando haces un parque industrial uno de los mandamientos es emplazamiento, emplazamiento y emplezamiento. Y este emplazamiento es estratégico: el nudo de comunicaciones que tiene por carretera [confluyen en el municipio dos de las autovías que vertebran la región: la A-92 y la A-45] y su ubicación en el centro de Andalucía.
También la conexión con el Puerto de Algeciras. Hay una empresa multinacional de España de la que salen dos trenes cada semana desde Algeciras y pasan por aquí, y van hacia Zaragoza. Lo lógico sería que estas mercancías que se van a depositar en Guadalajara, en Madrid… a la espera de ser distribuidas que se puedan quedar en Antequera.
Y el día que estén los corredores ferroviarios [como el Mediterráneo o el Ramal Central que van a tener su vértice en el municipio de Antequera] va a permitir que lleguen por toda Europa.
Hoy en día es muy difícil encontrar un parque de estas dimensiones que vaya a estar conectado con el ferrocarril. Y va a tener una estación multimodal de 750 metros que va permitir la llegada de trenes con muchos vagones para cargar mercancía.
Hay que pensar que en el futuro el ferrocarril va a tener una gran importancia en el transporte de mercancías por la reducción de la huella de carbono. Y esta va a ser otra de las principales ventajas que tenga.
Cuando hablamos del Puerto Seco de Antequera lo hacemos de todas estas características, y luego lo que le vamos a aportar nosotros: un parque que al haber sido planteado desde el principio nos permite aplicar nuevas tecnologías en materia energética como placas fotovoltaicas de última generación y entre el techo y las placas unos miniaerogeneradores para obtener energía eólica. Y también se está estudiando la implantación de energía por geotermia [se obtiene mediante el aprovechamiento del calor del interior terrestre] a través de circuito cerrado.
Al margen del ahorro de costes en el propio Puerto Seco, ¿que ventajas pueden aportar estas energías renovables a la economía de la zona?
Para el sector agroalimentario en la Vega de Antequera es importante porque los productos, a la hora de almacenarlos, se requiere de unas temperaturas determinadas. Somos especialistas en hacer naves a tres temperatura: ambiente, positiva y negativa. Y aquí nosotros le podemos garantizar el precio de la energía durante 10 años.
Al obtener la energía del propio parque hay un ahorro muy importante y la emisión de carbono es cero. Por lo tanto, por ejemplo, si un productor si hace allí un almacén, el ahorro que tiene en la emisión de carbono se lo puede abonar en su empresa o en el equivalente al transporte que haga por camión.
El uso de esas renovables es lo que convertirá al Puerto Seco de Antequera en un parque empresarial de ‘energía positiva’ y contar con una fuente para generar el llamado hidrógeno verde.
Como hemos previsto que todas las naves cuenten con estas placas solares y los miniaerogeneradores habrá un excedente y lo vamos a emplear para producir hidrógeno verde. Incluso se podrán cargar los camiones y coches que lleguen hasta allí.
¿Pero para producir hidrógeno verde también es necesario mucha agua? Una situación que ahora no se da debido a la actual situación de sequía.
Es una las cuestiones que estamos estudiando. Y estamos hablando también del uso de aguas depuradas. Sería un absurdo hacer el hidrógeno verde con agua potable. Hay que hacerlo con agua reciclada.
A nivel global, ¿que va a suponer la puesta en marcha del Puerto Seco de Antequera para un municipio de poco más de unos 42.000 habitantes?
Este proyecto es llenar la España vaciada. No es sólo para Antequera. Es para toda la comarca. Cuando se terminen las tres fases estamos hablando de 8.000 a 10.000 empleos. Si se multiplica cada puesto de trabajo por 2,5 -el trabajador más la pareja y la posibilidad de hijos- estamos hablando de 18.000 a 25.000 personas más.
Evidentemente hay que hacer más residencia y que sean asequible, y no pisos de lujos, para la gente joven. La logística requiere ya de una especialización, un dominio de la informática… Y además de gente joven, nosotros también buscamos reciclar a trabajadores mayores que están fuera del mercado, dándole una formación. Y aquí no vamos a encontrar a toda la gente que necesitamos y algunos vendrán de fuera.
Es un concepto nuevo. Cuando en Idec construimos un parque no es sólo buscar los terrenos, hacer las naves, venderlo y marcharnos. No es nuestra filosofía. Queremos quedarnos durante años.
Además de para el sector de la logística, se necesitarán perfiles de diferentes ámbitos laborales.
Es un parque lógico, industrial y de servicios. Estamos trabajando mucho la reindustralización de Europa. Con el Covid nos dimos cuenta que no sólo es almacenar. Hay que tener una buena logística y ser precavidos, pero no podemos estar dependiendo de Asia, sobre todo para componentes esenciales como pueden ser los microchip o productos sanitarios.Al reindustrializar la logística va junto con la producción, y esa también va a ser una de las ventajas del Puerto Seco de Antequera.
