Por su formación en Historia, Carmen Mora Mondéjar ya conocía los Dólmenes de Antequera. Pero reconoce que tras ver la evolución del recinto, especialmente en los últimos años, ahora le abruma un poco, máxime por lo que supone la responsabilidad ante Antequera y su comarca de llevar las riendas de este enclave monumental, que precisamente está de aniversario, tras su declaración como Patrimonio Mundial de la Unesco un 15 de julio de 2016.
¿Qué balance hace en estos cinco meses como directora del Conjunto Arqueológico Dólmenes de Antequera ?
Estoy muy contenta de haber llegado a este centro. Es un lujo trabajar aquí, porque este espacio tiene tantas singularidades que te permite tener esa versatilidad. Por un lado tenemos el yacimiento arqueológico, con lo que eso conlleva de investigación o conservación. Luego, por otro lado, tenemos el museo, con lo que conlleva en cuanto a las exposiciones temporales y también el trabajo de la exposición permanente. Y después está la gestión diaria, ya que es un sitio con mucha carga de trabajo. Estoy muy ilusionada y tengo un gran equipo que me apoya, y creo que los resultados que hemos tenido estos cinco meses se han visto reflejados en los medios.
Cuando llegó al recinto, ¿qué es lo que más le impresionó?
Por mi formación, conocía los Dólmenes y hace bastante tiempo que estuve aquí. Pero de los dólmenes que yo conocía a lo que actualmente tenemos con el museo hay una progresión abismal, sobre todo con la declaración de Patrimonio Mundial, y comparado con hace 20 años.
Me ha sorprendido la relación que hay entre el conjunto arqueológico y la ciudad de Antequera. Es también un punto clave para la comarca: no sólo para el municipio. Y en ese sentido me abruma un poco la responsabilidad que tengo.
La candidatura y la declaración del Sitio de los Dólmenes como Patrimonio Mundial de la Unesco provocó un incremento de las visitas, llegando a superar las 200.000 por año. ¿En qué medidas se trabaja para no perder ese interés por el conjunto arqueológico?
A partir del 20216, con la declaración de Patrimonio Mundial, el crecimiento de visitantes es bastantes importe, y seguimos creciendo en 2017, 2018 y 2019, y no ha sido tanto el alejarse de la declaración de Patrimonio Mundial como la pandemia de la Covid, que afectó a todos los sectores, y el turístico y cultural fueron dos de los más afectos. Pero una vez superado ese momento estamos consiguiendo cifras que nos vuelven a posicionar en el momento de 2016.
Ahora nuestros esfuerzos están centrados no tanto en la cantidad como en la calidad. Nuestro trabajo está muy orientado no sólo a ofrecer la visita a los tres monumentos [los Dólmenes de Menga y Viera y el `tholos` del Romeral] sino hacer una diversificación de la oferta. Acabamos de inaugurar las dos nuevas exposiciones temporales para que el público, además de venir al ver el conjunto, también pueda disfrutar una exposición de arqueología, sobre el megalitismo en las tierras de Granada, o del arte contemporáneo, con Carmen Laffón, que es una artista muy avalada y reconocida. Ofrecemos talleres, visitas al público educativo, música… una serie de actividades que tu puedes interactuar con el conjunto, que nos hace crecer y que la gente quiera venir a visitarlo y repetir.
Al Museo del Sitio de los Dólmenes le falta aún por inaugurar su exposición permanente. ¿Cuándo podría ser una realidad?
Seguimos trabajando diariamente en ello. Que sea una realidad lo antes posible es uno de nuestros objetivos fundamentales. Estamos trabajando en el tema de la colección: ya tenemos el procedimiento abierto con los museos que actualmente tienen las piezas que pertenecen a los Dólmenes. Estamos con esos procedimientos administrativos. Y por otro lado estamos trabajando en una actualización del proyecto expositivo y lo estamos ultimando. Vamos muy bien y con paso seguro. Sabemos que es un proceso lento y que depende de los recursos económicos que la Consejería de Cultura nos va dando, pero creo que va a merecer la pena. Va a ser un trabajo que se va a ver espectacular.
¿Y cuáles serán sus piezas estrellas?
No te lo puedo decir. [Risas] No lo voy a adelantar, pero decir que va a sorprender y que va a ser una maravilla.
¿Qué visitantes son los más habituales en los Dólmenes?
Principalmente recibimos visitantes de Andalucía. No obstante también tenemos un público extranjero muy importante, al que atendemos en el periodo estival. Como recibimos visitantes a lo todo el año, nuestra intención es dar a ese público una experiencia satisfactoria y que pueda completar la visita con las exposiciones temporales o participando en algún taller. Nuestra intención es llegar a todos los públicos”.
¿Y en qué periodos suelen acudir más?
Sobre todo en primavera y otoño, y en torno a los puentes. Sí hay menos en los meses de verano porque la climatología, en ese sentido, nos perjudica un poco.
Hablaba de diversificación de actividades y precisamente este fin de semana acogen un encuentro internacional sobre megalitismo. ¿Cómo ayuda este tipo de eventos a difundir el nombre de los Dólmenes y de Antequera?
Este tipo de encuentros lo que hace es posicionar a los Dólmenes dentro de un papel muy importante en la comunidad científica, que es otro tipo de perfil de visitante que podemos tener aquí, y que queremos tener aquí. El Museo del Sitio se inauguró el año pasado y prácticamente estamos arrancando lo que son todas sus actividades, como la investigación: tenemos un laboratorio, tenemos almacenes… La idea es que el museo sea un centro vivo, en el que acudan investigadores, estudiantes para hacer sus trabajos fin de grado o fin de máster, que se pueda consultar y trabajar…
A este encuentro científico vienen unos 40 investigadores de España y Portugal. Se está facilitando un trasvase de conocimiento y lo que se hace en otros sitios, y compartir y establecer redes de sinergia. Y hace que los Dólmenes no sólo sean un centro de cultura y turismo, sino también un centro de investigación.
Cuando llegué, me marqué un plan de acción con cosas que quiero trabajar, y una de ellas es promover la investigación y que los Dólmenes se vean como un centro de investigación vivo. Y el inicio de este camino ha empezado este fin de semana.
No sólo hablamos de celebrar encuentros de fin de semana, sino también de investigadores que puedan estar periodos más largos.
Esa es la idea. Queremos trabajar en ese sentido. La línea nos la va marcado el Plan Director y queremos comenzar a andar ese camino.
¿Para este tipo de eventos, se han alcanzado algún tipo de acuerdo con establecimientos hosteleros?
Sí. Este encuentro lo estamos organizando a través de un acuerdo marco que avala económicamente la Consejería de Cultura de la Junta y en colaboración con las empresas del municipio para sostener el operativo, no sólo de los 40 investigaciones sino del centenar de personas que acuden.
Y al margen de conocer los Dólmenes, ¿está previsto alguna actividad sociocultural exterior?
Las sesiones han acabado con una visita nocturna a los Dólmenes, desde un punto de vista más científico, y se ha organizado una actuación musical por la conmemoración del séptimo aniversario de la declaración del Patrimonio Mundial. A parte teníamos organizada una visita al Torcal, pero se ha suspendido por las altas temperaturas.
Además de hacer de los Dólmenes un centro de referencia científico, ¿qué otros objetivos se marcó cuando llegó?
El tema de la accesibilidad en el que estamos trabajando. Por ejemplo, en las dos nuevas exposiciones temporales hemos añadido una herramienta que son los códigos Navilens, que es una aplicación para llegar a todo tipo de público, volcando información, vídeo, lenguaje de signos… Queremos llegar a todos los públicos y a personas que tengan dificultades y más complicado el acceso a las actividades que ofrecemos.
