La Policía Nacional ha desarticulado un grupo criminal especializado en las sustracciones de bobinas de cable de cobre, a los que se les atribuye una docena de robos con fuerza en fincas en la Vega de Antequera. El valor del material robado, así como los daños provocados en las parcelas, ascienden a más de 150.000 euros.
La investigación denominada operación ‘Nostramanus’, llevada a cabo por el Grupo de Judicial de la Comisaría de Antequera, con la colaboración de la Policía Local del municipio granadino de Íllora, se inició el pasado verano, tras detectarse un incremento en las denuncias interpuestas por robos con fuerza y daños en la Vega de Antequera, producidas a lo largo de unas dos semanas. En ellas se ponía de manifiesto un ‘modus operandi’ muy similar: “los asaltantes derribaban los diferentes transformadores instalados en la torretas o postes de electricidad distribuidos en la zona, o procedían a forzar las construcciones que albergaban los citados convertidores de corriente -casetas de pozos-”.
Tras entrar en la finca, según ha explicado la Policía Nacional en un comunicado, los miembros de la trama procedían a desguazar los transformadores y sustraer de su interior las bobinas de cobre; material que era vendido en el mercado negro en diferentes chatarrerías o centros de reciclaje con sede en la provincia de Málaga y en otras limítrofes como Córdoba y Granada, a un precio muy inferior al de mercado, para así lucrarse y dar salida rápida a este material.
Al margen de las bobinas de cobre, los denunciantes también están acusados de sustraer otros materiales como herramientas o combustible, entre otros efectos, a lo que hay que sumar daños en las fincas que han afectado incluso a los cultivos, al no poder regarse con las bombas de extracción de agua de los pozos, debido a la destrucción de los transformadores.
“Esto suponía cuantiosas pérdidas económicas para los perjudicados, que se unían al elevado coste que entrañaba la sustitución y nueva instalación de este tipo de convertidores de corriente, los cuales, según los propios denunciantes, rondaba de media los 12.500 euros cada uno, ha expuesto la Policía Nacional en la nota.
Durante la investigación, los agentes consiguieron localizar uno de los vehículos empleados en la comisión de estos delitos en Íllora, identificando posteriormente a sus ocupantes. Y una vez que se obtuvieron las pruebas que acreditaban la implicación de los investigados en los robos, se procedió a la detención de tres hombres -y puestos a disposición del Juzgado de Primera Instancia e Instrucción número 3 de Antequera-, interviniendo el vehículo empleado para la comisión de los delitos y logrando recuperar un generador eléctrico sustraído en una de las fincas asaltadas. Asimismo se pudo identificar al autor de las receptaciones de todo el material sustraído.