Los turistas y demás visitantes que llegan a la Alcazaba de Antequera, cuando intentan subir por el ascensor instalado el pasado año, se encuentran que el elevador está fuera de servicio. Una situación que el concejal de Cultura y Patrimonio Histórico, José Medina Galeote asegura que se solucionará “en breve”, según ha dado a conocer este miércoles durante una comparecencia en el Ayuntamiento.
“Ha sido un tema técnico: un mando a distancia específico que hemos tenido que encargarlo, para que cuando el ascensor se use, sea una forma controlada”, ha explicado el edil.
En este sentido, Medina Galeote, ha incidido que la intención con la que se instaló este elevador es, fundamentalmente, facilitar el acceso al monumento a personas con movilidad reducida.
El edil de Patrimonio Histórico también ha querido destacar el esfuerzo en hacer visitable la Alcazaba de Antequera y el “trabajo ingente” hecho para hacer más accesible una construcción cuya entrada precisamente se hacía para que fuera inexpugnable.
Este ascensor, previsto para una decena de plazas y una capacidad de carga de 800 kilos, está ubicado en la parte exterior del Castillo o el también conocido como Reloj de Papabellotas, junto al muro paralelo a la entrada del recinto, situado a la derecha tras superarse el Arco de los Gigantes. Y el trayecto tiene dos puntos de desembarque: el primero, que accede al patio nordeste de la Alcazaba y al mirador sobre el Arco de los Gigantes, y el segundo llega al Patio de Armas.